Acabo de leer una noticia sobre la nueva estructura paneuropea de lastminute.
Noticias así suelen ser una indicación de problemas. No porque hay algo intrínsicamente malo en cambiar la estructura de una empresa. De hecho, es algo normal y necesario en empresas jovenes y con fuerte crecimiento, y lastminute sigue siendo una empresa joven. Pero la necesidad de comunicarlo de manera tan vehemente como lo ha hecho lastminute da la sensación de que la noticia está pensada sobre todo para tranquilizar a los accionistas inquietos y descontentos.
Pero el contenido de la noticia, en vez de tranquilizar, genera muchas preguntas. La nueva estructura de lastminute se basa en dos grandes divisiones: una es business-to-customer, otra business-to-business. Wow. Una empresa de tamaño y prestigio de lastminute es organiza en divisiones B2C y B2B en el año 2007? Pues me gustaría saber como estaban organizados hasta ahora. En su redescubrimiento de rueda van más allá: también crean una "novedosa" posición de Chief Operating Officer, C00. ¡Impresionante! A este ritmo pronto se les ocurrirá tener incluso un Chief Executive Officer, ¿no? Y dentro de unos años quizás lleguen a constituir hasta un Board of Directors, BOD?
Pero no debería criticar tanto. Al final, la nueva estructura es lógica. Al final, es Sabre, el dueño de lastminute que debería reflexionar sobre una noticia así, no yo. Tengo cosas más importantes por hacer, como ver que nuevos trucos ha aprendido hoy el hombre atrapado:-)
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