Friday, May 27, 2011

Seedrocket Campus Barcelona 2011

La semana pasada terminó el ya tradicional campus de seedrocket, esta vez organizado en Barcelona.

Puede sonar a autobombo, pero visto lo visto, los eventos de seedrocket actualmente no tienen comparación en España. Tengo varios motivos para esta afirmación: la calidad de grupo de los mentores involucrados, el enfoque práctico de las conferencias y de las sesiones de mentorización, la capacidad de inversión a los proyectos seleccionados (106k euros invertidos entre los 3 proyectos seleccionados), la cantidad y calidad de dealflow (más de 150 inscripciones) para seleccionar los pocos finalistas-participantes...

mentores de seedrocket



Si lo comparo con los primeros campus, está claro que estamos avanzando. Nunca antes había tantos fondos, incubadoras, aceleradoras, inversores privados, préstamos participativos de bancos, eventos para emprendedores como ahora. También empieza a haber cada vez más emprendedores con éxitos que les permite reinvertir al menos una parte de sus ganancias en nuevos proyectos. Todo esto es una base muy buena para que la fase inicial de arranque sea cada vez más facil, al menos para los proyectos con buen potencial y buen equipo fundador.

Para los interesados: La inscripción a los futuros campus, tanto en Madrid como en Barcelona (pdte definir sus fechas exactas) ya está abierta.

Wednesday, May 4, 2011

Prurito de emprendedor

Hace un par de dias tuve una de esas pequeñas revelaciones de momentos cuando la mente no está ocupada, Ni trabajando, ni revisando emails, ni dedicándose a  las tareas seudoproductivas de iPads...


Esta vez, la revelación gira alrededor de  prurito de emprendedor. A diferencia del prurito normal, el prurito de emprendedor es un "hormigeo" provocado por ganas de emprender un proyecto nuevo. A veces desaparece sin hacer nada. Otras veces es persistente, y intensifica con cada hora que dedicas a la nueva idea.

Normalmente, el prurito aparece cuando uno ve una oportunidad nueva; sea un problema sin resolver o simplemente una idea de hacer algo porque parece (im)posible. O sea, aparece con bastante frecuencia.

El prurito de emprendedor en sí no es ni bueno ni malo. Es un simple síntoma. Lo importante es siempre  analizar bien sus causas. ¿A qué me refiero? A veces el prurito viene porque realmente ves delante una oportunidad fantástica de hacer algo que tiene mucho sentido. Pero otras, y muchas vecs, viene porque el proyecto actual no tira como te gustarìa, porque se presentan dificultades inesperadas, porque ves que otros a tu lado avanzan mucho más rápido que tú, porque la hierba del vecino...

El primer caso siempre es bueno, porque significa que sigues vivo. Eres capaz de detectar nuevas oportunidades. Pero siempre que sientas el prurito has de ser honesto contigo mismo y buscar cuánto influye el segundo factor, el de prurito que sale de la frustración y desánimo con la situación actual.

No es nada facil, y conviene tener para esos momentos a un buen amigo (o mentor, o coach) para decidir que hacer con cada ocurrencia...