¿Para quién desarrollas?

¿Para quién desarrollas? es una pregunta mucho menos frecuente de lo que debería serlo. Es cierto que hay unas normas básicas de usabilidad y de comunicación; pero también está claro que teniendo en cuenta las características específicas del usuario típico se puede conseguir mucha más cercanía, provocar más participación y mejorar ratios de conversion.

Hay una escuela de usabilidad que se basa en personajes . Son personas ficticias que reunen características de un usuario típico. No, no hablo del típico perfil promediado marketiniano: nuestro usuario tìpico es 60% hombre, 40% mujer, tiene entre 33,2 años, 1,35 niños... No. Nada de promedios y generalización. Se trata de un personaje concreto; basado en un usuario real o en una ficción. Por ejemplo, para un portal de noticias, un personaje típico podría ser un hombre de 30 años; le gustan gadgets y nuevas tecnologías; se conecta diariamente desde su oficina hace ya 3 años. Está también en facebook, y es donante en la fundación Vicente Ferrer. (Sí, muchas veces los personajes se definen hasta detalles increibles para conseguir que sean más reales.)

Si la mayoría de mis usuarios son así, la web tiene que estar diseñada con esto en mente: por ejemplo, primar contenidos tecnológicos; contratar la publicidad segmentada; ofrecer herramientas de navegación avanzadas, personalizar las páginas (dado que conocemos perfectamente sus hábitos de navegación y sus gustos por su frecuencia de uso)...

Se suelen utilizar 2-3 personajes (porque hay pocas webs que pueden enfocarse a un único tipo del usuario), y revisan cada importante cambio de diseño o funcionalidad desde punto de vista de cada una de ella. Hay empresas que a este tipo de personajes les dan sus nombres y apellidos, les crean caras. Hasta hay quienes crean su silueta de cartón y lo tienen al lado de su mesa para poder "consultar" con él los cambios que se están implementando!

A mí me parece una metodología estupenda, porque permite analizar propuestas de mejoras de manera más objetiva; también fomenta en la organización la orientación hacia el usuario (importantísimo), y no es nada cara.

No tengo mucha experiencia en su aplicación (en atrapalo la usamos mucho menos que me gustaría), pero por lo poco que sé de ella la recomiendo mucho. En algún cajón tengo un par de referencias y títulos de libros que explican como implementarla por si a alguién le interesa...

Y tú: ¿Para quién desarrollas? ;-)

P.D. Para este post me he inspirado en el blog de Angel María.